Besos de perro: todo lo que debes saber

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Hoy 13 de abril se celebra el Día Internacional del Beso y en ADN Canino hemos querido derivar la efeméride hacia uno de los campos que mejor conocemos, el de nuestros amigos los perros. En este post hemos recopilado tres datos que consideramos de especial interés sobre los besos de nuestras mascotas como qué significan, si son un riesgo para nuestra salud o cómo reaccionar ante estos besos en tiempos de covid-19. ¡Vamos al lío!

Qué significado tienen los besos de perro

Siempre se han asociado los lametazos que los perros nos dan en la cara, sus particulares besos, con una muestra de cariño y la teoría popular es totalmente cierta. Así lo confirman los expertos en veterinaria: si un perro te lame o intenta lamerte la cara es que te tiene aprecio, que le caes bien, que te considera parte de su tribu. Según cuentan los expertos esos lametazos son un comportamiento de cohesión grupal, una muestra de comunicación positiva que los canes tienen entre ellos, por lo que al hacernos parte de ese ritual propio de la especie nos están dando a entender que sí, que efectivamente nos tienen mucho cariño.

¿Pueden ser peligrosos para nuestra salud los besos de perro?

Teóricamente, si un perro está bien cuidado y tiene todas las vacunaciones en regla, los riesgos para nuestra salud de los lametazos que los perros nos dan en la cara, disminuyen. Pero ‘ojo cuidao’, que no desaparecen. Como recordaban hace relativamente poco varios veterinarios en una pieza publicada en The Huffington Post, que un perro te lama la cara, la boca o alguna herida puede llegar a ser peligroso. No en vano, según explicaban, la boca de los perros tiene un número de bacterias similar al de los humanos (pero distintas), alrededor 600, lo que abre la puerta a la transmisión de enfermedades zoonóticas.  

Según los expertos, entre las bacterias más comunes se encontrarían el E. coli y el campylobacter, que pueden causar enfermedad gastrointestinal de diversa gravedad en humanos. También la toxocara, una enfermedad derivada de la tendencia de los canes a lamer cosas por la calle, también heces. Es más, según aseguraba uno de los expertos, algunos estudios indican que uno perro de cada seis come excrementos de manera habitual, por lo que la cantidad de bacterias que pueden tener en la boca puede ser muy elevada y una fuente de infecciones bacterianas. Así que lo dicho: ‘¡Ojo cuidao!’.

¿Y lo de besar al perro en tiempos de Covid-19?

Hasta donde se sabe, y ya se sabe mucho, la OMS insiste en que los perros no son transmisores de la Covid-19. Todo lo contrario, somos nosotros, los humanos, quienes podemos contagiarlos a ellos. Y parece que con la variante británica del virus más si cabe que con las precedentes. Así que si evitamos darles besos, que sea pensando en su salud y en su bienestar, no creyendo erróneamente que nuestras queridas mascotas nos puedan contagiar a nosotros con el coronavirus.

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