Obesidad en perros: cómo detectarla, posibles causas y consecuencias

De la pandemia de sobrepeso y obesidad que asola a nuestra civilización no escapan ni los perros. Por eso, coincidiendo con el Día Mundial de la Obesidad, no está de más recordar que nuestros amigos los canes también pueden padecerla, porque ese es el primer paso para detectarla y, cómo no, tomar las medidas oportunas para conseguir que nuestro perro alcance un peso saludable.

Puede que a simple vista nos parezca más difícil detectar la obesidad en perros, pero la realidad es que los propietarios de canes nos damos cuenta enseguida si nuestro amigo coge peso. No obstante, si tienes dudas, hay tres aspectos visuales que te pueden dar pistas: Cuando un perro tiene un peso normal, sus costillas se palpan con facilidad. No ocurre lo mismo cuando sufren sobrepeso u obesidad, ya que hay que presionar bastante sobre la capa de grasa para llegar a ellas; También con peso normal, la cintura del perro se distingue con facilidad si le miramos desde arriba y la línea del abdomen queda marcada y visible desde el lado. Ni la cintura ni la línea del abdomen se pueden apreciar cuando un perro sufre obesidad, un concepto que se utiliza para referirse a aquellos perros que superan en al menos un 20% su peso normal.

Posibles causas de la obesidad

Según explican en el portal zooplus.es, la causa más frecuente del aumento de peso en los perros es una ingesta de energía excesiva, que se puede producir por darle cantidades de comida demasiado grandes, un acceso ilimitado a la comida o una densidad calórica excesiva en cada ración de comida. Cualquiera de estos motivos es casi una entrada a la obesidad, ya que como explican en la web especializada, “la energía cuesta mucho de compensar con ejercicio porque el perro solo consume alrededor del diez por ciento de su energía diaria moviéndose”.

Detrás de la obesidad, no obstante, también se pueden esconder determinadas enfermedades como el hipotiroidismo, aunque tras la mala alimentación y la baja actividad física, la otra gran causa de la obesidad es la castración, que suele llevar a muchos perros a comer más y moverse menos. Es decir, a tener todas las papeletas para coger peso.

Consecuencias de la obesidad

Como ocurre con las personas, sufrir obesidad tiene un impacto directo sobre la salud de los perros que se manifiesta, entre otras cosas, en una disminución de la longevidad y una mayor predisposición a sufrir determinados tumores y cánceres. Pero, más allá de estos problemas más graves, el sobrepeso también tiene un impacto importante en la calidad de vida de los canes, ya que estos van a tener más probabilidades de sufrir problemas en las articulaciones y los huesos, una movilidad más reducida, mayor dificultad respiratoria así como una mayor intolerancia al ejercicio físico a consecuencia de la fatiga, más probabilidades de sufrir enfermedades como diabetes o hiperadrenocorticismo (síndrome de Cushing) y de presentar problemas reproductivos.